Las residencias de ancianos han sido zonas de alto riesgo de contagio durante la pandemia. Por este motivo, los cuidados en el domicilio han sido y están siendo la solución ideal para muchas familias.

Ante la actual situación, hemos tenido que adoptar todas las medidas necesarias para garantizar la protección de las personas mayores y/o dependientes, siendo ahora nuestra “nueva normalidad” y la de todas las personas que seguimos cuidando en su hogar. Agradecemos también la gran profesionalidad de nuestras cuidadoras, que han realizado un gran esfuerzo y han sabido estar a la altura de las circunstancias.

¿Cuáles son las principales medidas que hemos adoptado?

✓ Protocolo de higiene para las familias y nuestras cuidadoras. Siguiendo las pautas del Ministerio, al comienzo de la pandemia Interpersonas elaboró un protocolo con medidas de higiene básicas que tanto las familias y personas dependientes como las cuidadoras han incorporado en su día a día.

El uso de mascarillas, el lavado de manos y la desinfección del hogar son de momento las tres principales herramientas que tenemos para evitar los contagios.

✓ Distanciamiento social. Tras finalizar el estado de alarma y la progresiva recuperación de nuestra rutina, la distancia social se ha ido acortando cada vez más, provocando en las últimas semanas nuevos rebrotes. Pero no podemos olvidar que las personas a las que estamos cuidando siguen siendo un grupo de población muy vulnerable, por eso, nuestras cuidadoras han sabido respetar en todo momento el acercamiento social, limitando sus contactos con familiares, con grupos muy reducidos y siguiendo los protocolos de higiene y distanciamiento establecidos.

✓ Confinamiento voluntario de nuestras cuidadoras internas. Desde Interpersonas queremos destacar y agradecer la gran profesionalidad de nuestras cuidadoras, especialmente, las que han estado internas en los domicilios. Durante los meses que duró el confinamiento, voluntariamente y por decisión propia la mayoría decidieron confinarse en el domicilio junto con las personas que habían estado cuidando durante tanto tiempo, evitando de esta forma poner en riesgo la seguridad de los ancianos, de sus familias y la suya.

✓ Recuperación progresiva de las rutinas de las personas mayores. Cualquier cambio en la rutina de una persona mayor puede suponer un trastorno en su evolución física y emocional. Siguiendo los protocolos de higiene y distanciamiento establecidos, las personas mayores y sus cuidadores deberán recuperar progresivamente sus rutinas. El hecho de poder dar un pequeño paseo por el barrio, poder charlar con algún vecino en el parque o ir a comprar el pan, pueden ser beneficiosos para mejorar su estado de ánimo y quitarse el miedo a volver a relacionarse con las personas.

✓ Detección y actuación ante síntomas de Coronavirus. Es muy importante que las cuidadoras estén atentas cada día al estado de salud de las personas que están cuidando, y en el caso de detectar algún síntoma como son la fiebre, tos, fatiga o asfixia, entre otros, notificar de inmediato a los familiares y después al Centro de Atención Primaria, que determinarán si deben hospitalizar al paciente o aislarlo en el domicilio. Si se tuviera que aislar al paciente en casa, se tomarán todas las medidas necesarias para garantizar la seguridad de la cuidadora, como seria la desinfección a conciencia del hogar y el uso de EPIS para tratar a este tipo de pacientes (mascarillas FFP2 sin válvula, batas, pantallas de protección, gafas, guantes y polainas).

✓ Especial atención al estado de salud de los cuidadores. Todos debemos actuar de forma responsable y debemos cuidarnos para poder cuidar, por eso nuestros cuidadores están siempre pendientes de su estado de salud. En el caso de presentar cualquier síntoma relacionado con Covid19, deben avisarnos de inmediato y abstenerse de acudir al domicilio para seguir prestando el servicio.

Tras acudir al Centro de Atención Primaria para realizarse la PCR, deberán permanecer en aislamiento hasta que les notifiquen los resultados y seguir las pautas recomendadas por los sanitarios. Aunque el resultado sea negativo, podrán reincorporarse al trabajo, pero deberán cuidar al máximo las medidas de higiene y seguridad durante dos semanas más. Si la PCR fuera positiva, se cubrirá el servicio con otra empleada de hogar hasta que la cuidadora obtenga PCR negativa y pueda reincorporarse de forma segura.

Son muchas las familias que siguen preocupadas en proporcionar los mejores cuidados a sus seres queridos mayores y/o dependientes, por eso, en Interpersonas seguiremos ofreciendo los servicios que necesitan aplicando todas las recomendaciones y medidas de seguridad e higiene, para seguir garantizando un servicio de calidad y seguro dada la situación en la que estamos.